Las pruebas que se realizan después de la cirugía para evaluar los patrones de ciertos genes (a veces llamado perfil de expresión genética) pueden ayudar a predecir si los cánceres de seno en etapas iniciales (etapa 1 o 2) tienen probabilidades de regresar después del tratamiento inicial. Los doctores pueden utilizar esta información para saber quiénes tienen más probabilidad de beneficiarse de la quimioterapia después de la cirugía del seno.
El análisis de los patrones de varios genes diferentes al mismo tiempo puede ayudar a predecir si ciertos cánceres de seno en etapa 1 o 2 tienen probabilidades de regresar después del tratamiento inicial. Pruebas como estas son parte de lo que se denomina “medicina personalizada” (se estudia más su cáncer para suministrar un tratamiento hecho a la medida).
¿Cómo se hacen las pruebas?
La prueba Oncotype DX® y la prueba MammaPrint® son ejemplos de pruebas que evalúan diferentes conjuntos de genes del cáncer de seno. Actualmente se desarrollan también más pruebas.
La prueba evalúa un conjunto de 21 genes en las células cancerosas que se obtuvieron de las muestras del tumor al realizar la biopsia para asignar una “puntuación de recurrencia” que va desde 0 a 100. La puntuación refleja el riesgo de que el cáncer de seno regrese (recurrencia) en los próximos 10 años y la probabilidad de que usted se beneficie de recibir quimioterapia tras la cirugía.
Una puntuación más baja (normalmente 0-10) significa un bajo riesgo de recurrencia. La mayoría de las mujeres con puntuaciones de baja recurrencia probablemente no obtiene beneficios de la quimioterapia.
Una puntuación intermedia (normalmente 11-25) significa un riesgo intermedio de recurrencia. La mayoría de las mujeres con puntuaciones intermedias de recurrencia no obtendrá beneficios de la quimioterapia, aunque las mujeres más jóvenes de 50 años con una puntuación intermedia mayor (16-25) pudiera ser que sí. Las mujeres en este grupo deberán hablar con su médico sobre los posibles riesgos y los beneficios de la quimioterapia.
Una puntuación alta (normalmente 26-100) significa un riesgo mayor de recurrencia. Las mujeres con puntuaciones altas de recurrencia son más propensas a obtener beneficios de la quimioterapia para ayudar a reducir sus probabilidades de que el cáncer regrese.
MammaPrint®: esta prueba se puede usar para ayudar a determinar la probabilidad de que los cánceres de seno recurran en partes distantes del cuerpo después del tratamiento. Se puede usar en cualquier tipo de cáncer de seno que sea pequeño (etapa 1 o 2) y que no se haya propagado a más de tres ganglios linfáticos. El estado de los receptores hormonales y de HER2 se evalúa como parte de esta prueba.
La prueba analiza 70 genes diferentes para determinar si el riesgo de recurrencia del cáncer en los próximos 10 años es bajo o alto. Los resultados de la prueba se presentan como “bajo riesgo” o “alto riesgo”.
¿Qué significan los resultados de la prueba?
La prueba de expresión génica (perfil de expresión genética) puede ayudar a predecir qué mujeres probablemente se beneficiarán de la quimioterapia después de la cirugía del seno. (A esto se le llama quimioterapia adyuvante). La terapia hormonal es un tratamiento estándar para los cánceres de seno con receptores hormonales positivos. En cambio, no siempre está claro cuándo utilizar la quimioterapia. Estas pruebas pueden ayudar a tomar esa decisión.
Aun así, estas pruebas no pueden indicar con certeza si el cáncer de una mujer en particular regresará con o sin quimioterapia. Muchos médicos usan estas pruebas (junto con otra información) para ayudar a tomar decisiones sobre la quimioterapia. Recuerde que estas pruebas no son necesarias en todos los casos. Por ejemplo, si tiene un cáncer de seno de rápido crecimiento o en etapa 4, usted no necesita estas pruebas porque debe recibir quimioterapia como parte del tratamiento convencional.
Actualmente estas pruebas siguen siendo evaluadas en estudios clínicos de gran alcance para comprender mejor cómo y cuándo sería el momento más adecuado para emplearlas. Mientras tanto, es buena idea que las pacientes pregunten a sus médicos si estas pruebas podrían ser beneficiosas para ellas.